En un lamentable suceso, durante un partido disputado entre los equipos Lago del Bosque y Reconquista en la cancha del Lago, se desató una batalla campal que culminó con la brutal agresión a un árbitro, dejándolo con el brazo fracturado y sin poder desempeñarse en su trabajo.

Según testigos presenciales, jugadores e hinchas, tras un controvertido fallo arbitral, rompieron el alambrado perimetral y se abalanzaron hacia los árbitros presentes en el encuentro. Diego, el árbitro principal, recibió múltiples golpes que resultaron en la fractura de su brazo, dejándolo imposibilitado de realizar sus tareas laborales.