El fallecimiento de Daniel Barrientos, un colectivero de 65 años, ha dejado consternada a la comunidad de Virrey del Pino en La Matanza. Barrientos fue asesinado en un asalto a plena luz del día mientras conducía su colectivo de la línea 620. Sus familiares, amigos y compañeros de trabajo lo despidieron en un emotivo velatorio que se realizó en la sala funeraria Nuestra Señora del Valle. Durante la despedida, más de 50 colectiveros acompañaron a la familia y expresaron su preocupación por la inseguridad que enfrentan en su trabajo diario.

Mientras tanto, la Policía detuvo a dos sospechosos, uno de los cuales es cuñado de un chofer de la línea 620, que se encuentra en paro desde el lunes. El segundo sospechoso fue detenido mientras el cortejo fúnebre se trasladaba por el Metrobús de Ruta 3. Este segundo sospechoso es homónimo del primero y asegura tener pruebas que lo desvinculan del crimen.

El dolor de la familia Barrientos se vio reflejado en el recorrido del cortejo fúnebre, que fue acompañado por cinco colectivos con una bandera que mostraba el rostro de Daniel Barrientos y el de Leandro Alcaraz, otro chofer de la línea 620 que fue asesinado en 2018. Antes de partir al cementerio de González Catán, Daniela Barrientos, hija del fallecido, rechazó la posibilidad de que el hecho fuera un ajuste de cuentas y reiteró que se trató de un hecho de inseguridad.